jueves, 7 de noviembre de 2013

COMENTARIO SOBRE LOS OJOS DE LA PIEL DE JUHANI PALLASMAA

Juhani Pallasmaa habla de que la arquitectura tiene que ser multisensorial, dando a entender que la arquitectura debe de poderse apreciar o experimentar con todos nuestros sentidos, debe de haber esta interacción constante entre el emisor (arquitectura) y el receptor (usuario) lo cual lo considero muy cierto porque, como ya dije en alguna otra reflexión de este blog, la arquitectura me parece que debe de brindar un cierto encanto y lo debe de conservar, y ese encanto se puede lograr cuando el arquitecto va a un nivel más profundo de la arquitectura que es este aspecto de los sentimientos.
También mencionó un aspecto que me llamo mucho la atención y que se refiere a que la arquitectura fortalece el sentido de cada uno de ser en el mundo. Aunque al principio me pareció absurdo el comentario, realmente la buena arquitectura al hacer uso de los sentimientos nos ayuda a los seres humanos a poder apreciar nuestro entorno, a poder reconocernos a nosotros mismos, sabernos humanos, reconocernos en tal lugar, en tal momento, pero aunque todo esto sea cierto, el poder fortalecer este ‘yo’ depende mucho de la persona y del trabajo que haga consigo mismo, pues dudo mucho que toda la gente pueda entrar en ciertos niveles de profundidad, de reflexión, etc.  

COMENTARIO SOBRE LA LECTURA ATMOSFERAS DE PETER ZUMTHOR

A lo largo del semestre, en mi clase de diseño, hemos analizado al reconocido arquitecto Peter Zumthor, el cual me ha dejado muy claro, sobre todo con esta última lectura, que lo más importante en la arquitectura es crear atmosferas. ¿Qué quiere decir esto?, que lo más importante al diseñar un espacio es saber transmitir algún sentimiento, emoción o estado, es la capacidad del diseñador o arquitecto de lograr en el usuario una especie de dependencia hacia ese espacio que tiene y transmite cierta belleza, cierta comodidad, cierta iluminación, ciertas limitaciones, ciertas oportunidad, detalles que te permiten experimentar el espacio con tus sentidos. Tan es así que me hace pensar que a este fenómeno podríamos llegar a llamarlo ‘encanto’.
Realmente si la arquitectura solamente fuera diseñar el espacio para una persona y sin poder aprovechar esta libertad del arquitecto para poder jugar con los sentimientos del hombre, la arquitectura no podría ser considerada una de las bellas artes. Pienso yo que el arte de la arquitectura esta precisamente en el momento que uno empieza a sentir algo en un espacio, en una atmósfera.